El día ha iniciado, tú Sol nos has alumbrado
este seis de marzo el calor nos abraza
como ese verano que Dios te trajo al mundo
cuando tus radiantes ojos dieron vida a el corazón de muchos.
El calor de tu abrazo, es lo mejor que tenemos
cada uno de los que te queremos.
Los días azules y radiantes como el de hoy
recuerdan el día que nació el Sol.
Y la vida que en un atardecer o un amanecer
me hacen reconocer que no hay vida si no conociera
el latir de tu corazón y lo profundo de tus ojos
como el atardecer que provoca una nueva ilusión en vida.
Quiero verte de nuevo mañana y que esta ventana
sea iluminada de nuevo con tu resplandor
como en esos días azules que no hay nubes
que te opaquen y solo el cielo esta para ti.
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